Un edificio tan emblemático de nuestra ciudad y tan significativo para la sociedad, demanda realizar trabajos de restauración que permitan mantenerlo en buen estado.
Esta obra se hizo en 3 etapas, primero la fachada de calle Córdoba y ochava, segundo la de calle Italia, y por último el frente del ingreso al patio interno y muro del portón de calle Italia.
Para realizar la obra fue necesario colocar andamios, retirar elementos agregados (aire acondicionado, salida de estufas.), limpiar las canaletas perimetrales, verificar embudos, caños de desagüe y proteger las canaletas. También se procedió al hidrolavado con bicarbonato de sodio proyectado con aire comprimido de todas las fachadas en todos sus niveles y en todos sus planos y a la reparación y reconstrucción de las barandas.
Otros aspectos contemplados fueron el tratamiento de reposiciones anteriores de revoques, integración de revoques faltantes, tratamiento superficial del revoque. La reposición de elementos ornamentales premoldeados faltantes, fisurados o fracturados, la fijación de elementos ornamentales premoldeados y el hidrofugado final. Una vez finalizados los trabajos de revoque, sea de reposición o nuevos, se procedió a la hidrofugación y consolidación de los paramentos y/o artesonados mediante la aplicación de éteres de ácido silícico y siloxanos oligométricos, del tipo Wacker 290 en base solvente. También se colocaron elementos espanta palomas. El portón ubicado sobre calle Italia se lijó y pintó completo.
El objetivo de esta obra es devolver al edificio su aspecto original, para preservar la historia y la cultura, ya que el mismo es una de las piezas fundamentales del Paseo del Siglo que reúne los edificios considerados de “la época de oro de la arquitectura rosarina”.
Rectorado. Restauración de fachadas.
Años 2017 – 2018